26 de febrero de 2012

Se pierde.

Tan difícil como quitarse la venda de los ojos
tal fácil como perder el gusto por el todo,
así es ahora aquí,
donde las palabras no suenan igual de llenas que antes,
donde el tiempo está detenido... todo es tan insulso...
tan apático... y cuanto más intentas algo,
es cuanto más te pierdes y te pierdes
y te olvidas de lo que necesitas realmente
se olvida y se pierde.

Estados desconocidos.

Quiero empezar y la suerte va detrás,
y sería capaz de volverte a buscar,
pero las montañas cubren el camino,
y cada noche me pregunto... ¿será el destino?

Nada tiene sentido,
me repito a mis adentros,
y es como si de este movimiento, tan lento y eterno,
como si de este movimiento surgieran estados desconocidos.

Pero nadie confía en mis palabras,
pues las dudas así se pagan y al cruzar el marco,
crece la sensación de que cada día, estás más alejado,
encomendarse a la suerte, a la deriva en el desierto.

Que me expliquen de una vez ¿Qué es el del mundo en movimiento?
cuando solo yo me tengo, y mis ganas se van perdiendo,
entre tus dedos, entre tus huesos,
Que me expliquen de una vez ¿Qué hacer?
Cuando tus palabras ya no son escuchadas y nadie ya te cree.